Entrevista a: Lucía Martín Abello


Se define a sí misma como autoexigente, curiosa, inquieta o risueña y, al igual que María, su personaje en Amar es para siempre, defiende valores como la empatía, el amor infinito por la familia, la erradicación de las injusticias o la solidaridad. Lucía Martín Abello siempre se ha sentido atraída por el poder de contar historias de la interpretación y, gracias a su primer trabajo en televisión, en la TV movie “No soy como tú”, se lanzó de lleno a esta profesión. Hoy Lucía nos habla de su pasión por la música, y de su lista de artistas favoritos; se queja de la injusta situación que está viviendo el cine y la cultura del país; explica sin tapujos lo que piensa del mundo de la moda; y nos abre las puertas de su vida para conocer a fondo todos los rincones que componen su mundo…
¿En qué momento de tu vida decides que quieres ser actriz? ¿Cómo fueron tus inicios en este mundo?
Como bien dijo mi compañero Fernando Guallar ¨ El que es actor (de alguna manera) siempre lo ha sido¨. Creo que la interpretación al igual que otras profesiones las vamos descubriendo con el tiempo y nos vamos sintiendo identificado/as con sus encantos, propósitos y finalidades de la misma.
Siempre me atrajo la interpretación y su poder de contar infinidad de historias, pero para precisar, se podría decir que tomé la decisión cuando Eva Leira y Yolanda Serrano me brindaron la oportunidad con mi primer trabajo en Televisión: ¨No soy como tú¨.
Los inicios los recuerdo con grandes dosis de curiosidad y encanto, estaba conociendo la profesión, la cantidad de personas que están detrás de cada secuencia, el funcionamiento y los tiempos de un rodaje y un largo etc.

Te conocimos en televisión por tu cameo “Los Protegidos” y tu participación en la TV movie “No Soy Como Tú”, más adelante te vimos interpretando a Paula en “Los Quien” y hoy podemos seguirte cada tarde interpretando a María, en “Amar es para siempre”. Háblanos de cada una de las experiencias y con qué te quedas de cada una de ellas.
Esta es una pregunta frecuente así que quizás peque de repetitiva, o no, en lugar de contaros con qué me quedo de cada experiencia, lo haré referido a mis personajes. He tenido la tremenda suerte de poder disfrutar las diferencias abismales entre Judith, Lucía, Paula y María, cada personaje tenía una esencia muy distinta y las experiencias que viví junto a ellas también. Con Lucía inicié el camino y me quedo con su valentía feroz, con Judith podría decirse que fue ¨breve pero intenso¨, como bien habéis dicho era un cameo en la serie de ¨Los Protegidos¨ así que las sesiones fueron pocas pero muy enriquecedoras y sin duda alguna me quedo con su capacidad de, tras haber cometido un tremendo error, perdonarse a sí misma.
Con Paula conocí la comedia, otro mundo al que me moría de ganas por viajar. Tuve la suerte de trabajar codo con codo con compañero/as inmenso/as de la profesión como: Javier Cámara, María Pujalte, Julián López, Kity Mánver, Cristina Alcázar, Álvaro Fontalba, Elena Rivera y Fernando Gil, ello/as me enseñaron incontables cosas que no se aprenden ni en los ¨librillos¨, ni en las clases, ni estudiando. Y con María sigo aprendiendo cada día, la experiencia en ¨Amar es para siempre¨ está siendo increíble, tanto es así que apetece que no tenga fin… como su título bien indica.
